Aventuras (no tan) extremas de viajes con niños
Publicado el 17 DE FEBRERO DE 2015 por LEANNE
Montando en trineo en Canmore, Alberta
Archivado en ¡DIVERTIDO!, VIAJAR
Hola a todos, Acabamos de regresar de montar en trineo y decidí que no puedo esperar a compartir la experiencia con todos ustedes. Fué ¡¡ESTUPENDA!!
Después de nuestro divertido viaje para montar en trineo en familia, me inspire para agregar una manualidad de papel de husky siberiano al sitio web.
Sobre mí
Como muchos de ustedes ya saben… no soy terriblemente aventurera. Soy una mamá a quien le gustan las manualidades y los libros. Mis últimas palabras antes de despedir los niños son en general cosas como: “no olvides tu casco” o “asegúrate de mirar a ambos lados antes de cruzar la calle”. Si aún no he sido lo suficientemente clara…exponer mis hijas a un peligro extremo solo por la adrenalina ¡no es algo que yo haría! Si tú eres del tipo de personas que se lanza en paracaídas con tu bebé asegurado a tu cuerpo en una bolsa de canguro, entonces nuestra aventura en trineo tal vez no sea muy relevante para ti. Pero si compartes el mantra de “sí, divertirse es fabuloso… pero lo primordial es la seguridad” entonces tal vez te intriguen algunas de las aventuras (no tan) extremas que hemos compartido con las niñas – incluyendo la genial experiencia de montar en trineo de perros.

El grupo
Nuestro grupo de aproximadamente 25 personas entusiasmadas, 12 trineos de perros y aproximadamente 75 perros exuberantes (principalmente huskies) tenía también una justa parte de jóvenes adultos dedicados a disfrutar aventuras por el mundo con un bajo presupuesto. Pero también incluía un número de familias – así que aproximadamente una quinta parte de nuestro grupo total eran niños. El más pequeño era un bebé… tal vez de 6 meses (ya sostenía la cabeza solo, pero aún usaba la silla para bebés del carro). Había una niña de aproximadamente 3 años, una de 9, una de 12 y una de 17.
Con base en las reacciones del grupo, las niñas de 9 y 12 años tuvieron una diversión como nunca antes. Estaban emocionadas con los perros, con la montada en trineo, con su FABULOSO papa por manejar el trineo tan bien y no querían otra cosa que regresar en el verano con los perros para que “corrieran libres” durante el verano para mantenerlos en forma.
Nuestra hija Kaitlyn era la que tenía 17 años. Ella también pasó un buen rato pero menos “efervescente” que las niñas más pequeñas. En un punto medio entre la euforia de la niñez y la inquietante calma de los “grandes”, escuchó atentamente las instrucciones, manejó con éxito el trineo durante todo el recorrido y pasó mucho tiempo creando amistad con “sus” perros.

Los perros
Como mencioné, los perros eran principalmente huskies y malamutes, lo que hizo que se sintiera como si fueran perros “reales” de trineos.
Antes de que comenzara la aventura tuvimos aproximadamente 5 minutos para saludar a los perros (los acariciamos mucho… ¡cielos, su pelaje es muy SUAVE!). Estos son animales muy hermosos y, con esta compañía de excursiones, todos se comportaron muy bien y estaban entrenados y felices de interactuar amablemente con los invitados. Los perros que eran más nerviosos usaban pañuelos rojos – muchos de ellos son animales adoptados. Sugiero que para los niños que ya tienen edad suficiente, antes de ir les expliques que un animal rescatado o adoptado puede ser un poco más nervioso que uno que se ha divertido haciendo su trabajo toda su vida. Agradecí tener un recordatorio visual (el pañuelo rojo) para mostrar cuales perros eran más amistosos con los extraños. Kaitlyn se llevó muy bien con un perro inmediatamente – cada vez que dejaba de acariciarlo, este la tocaba suavemente con la pata y con el hocico (¡vamos, humana…sigue rascándome las orejas – se siente muy bien!)
Los siguientes 15 minutos de nuestra aventura de 2 horas los pasamos aprendiendo como manejar un trineo de perros – estas instrucciones eran muy importantes porque la mayoría de los invitados iban a manejar solos. Los niños inquietos pueden tener dificultades en esta fase, pero el instructor hizo un buen trabajo manteniendo un ambiente relajado y gracioso mientras abarcaba todo lo que se necesitaba (sí, hubo una prueba al final, así que ¡presta atención!). Había muchos jóvenes aburridos alrededor (los perros también están esperando que comience la aventura) así que inclusive los niños inquietos deberían poder asumir esta fase sin esforzarse mucho.
Después de eso recibimos nuestros trineos asignados, nos subimos y salimos inmediatamente. Algunos pueden sentir que el entrenamiento fue un “desperdicio” de una porción de las dos horas, pero a nosotros nos pareció perfecto – nos familiarizamos con los perros y el tiempo restante fue más que suficiente para disfrutar la experiencia. Recuerda que también hay aventuras disponibles de 4 y 8 horas, así que puedes explorar esas opciones si te preocupa que no vas a tener suficiente tiempo en el trineo. Para nosotros, dos horas fue suficiente (como mama prefiero irme cuando los niños aun quieren quedarse un ratito más ¡en lugar de cuando desearían que ya se hubiera terminado!)
Quiénes no deberían ir
El grupo número uno de personas que en mi opinión no deberían montar en trineo, es el de los niños que le tienen miedo a los perros. Los perros de trineo son animales grandes y fuertes (¡espléndidos!). Su ladrido es fuerte — y sí que les gusta ladrar… como en el caso de los atletas que se alistan para un juego importante, los perros ladran emocionados justo antes de irse hacia el canal. Una vez que comienzan a correr se quedan callados, pero si tienes un pequeño que les tenga terror a los perros, el ruido inicial probablemente será suficiente para arruinarles la excursión. Espera algunos años hasta que tu hijo se sienta cómodo estando cerca de animales.
Versión imprimible de estas instrucciones